Se supone que esto iba de ventas.
No me refiero a este email, sino a todos los que llevo escritos.
Esto se supone que iba de ventas y tú estás recibiendo mis ocurrencias, que muchas de las veces no son ventas ni comercio electrónico sino más bien son vivencias sobre las que pensar.
Aunque quizás yo no soy quien para dar consejos, los doy, y cada uno hace lo que quiere con ellos.
El caso es que aún quedan muchos temas relevantes que tocar, que son interesantes porque tratan de nuestras propias vidas, pero en muchas ocasiones las ventas las tocan de lejos, sólo de lejos.
Entonces… ¿Para qué sigo por ahí?
No sé. Tú sabrás. Tú sigues ahí leyendo.
¿Para qué sigues leyendo?
Porque digo cosas que te resultan interesantes y/o entretenidas.
¿Para qué necesitas cosas interesantes o entretenidas?
Quizás para aplicarlo en la vida misma.
Porque hay una conexión directa entre las ventas y la vida misma.
No me refiero a la frase de «la vida es venta» que tanto nos gusta usar en ocasiones.
Sino a que las ventas tienen una repercusión directa en la vida, pero la vida que lleves también tiene repercusión en tus ventas.
¿Para qué quieres tú vender?.
Que sí, que si mi proyecto, que si éxito, que si … lo que tú quieras:
Tú quieres vender para tener dinero.
¿Para qué quieres tener dinero?
Que sí, que la casa, que el coche, que viajar alrededor del mundo, que sí,… lo que quieras.
Tú quieres tener dinero para hacer todo lo que no se puede hacer sin dinero. Yo lo llamo libertad.
¿Para qué quieres tener esa libertad?
Que si la casa, que el coche, que viajas alrededor del mundo, que sí,… lo que quieras.
Tú quieres tener esa libertad para vivir lo mejor posible.
¿Y para qué quieres vivir lo mejor posible?
Para ser feliz.
La vida misma. ¡A vender!.
Fin.
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