Repetir lo que te pone

Estamos enchufados!. Vamos a petarlo!. Vamos a ser excelentes en nuestro mercado con una mente positiva aprendiendo del rechazo y blablabla…

Mira. No somos así. No lo somos.

Aprendemos a ser así, porque vivimos en el siglo XXI, y aprendemos y aprendemos.

¿Para qué aprendemos y aprendemos?. Para no ser lo que seríamos sin ese trabajo de formación y modelaje de nosotros mismos. Para no ser unos cavernícolas miedosos en un entorno extremadamente hostil.

Ya sabes a lo que me refiero.

Primero nos educamos, en el sistema que tenemos, que no hay otro, luego si somos un poco inquietos empezamos a leer esa mierda de libros que te cambian la vida, y decidimos que vamos a ser… ejem… «La mejor versión de nosotros mismos», y empezamos a repetir frases que un rato antes nos sonaban estúpidas y nos damos golpes en el pecho por la persona nueva que somos después de leer esa mierda de libros que te cambian la vida.

Vale. Perfecto. Genial. Todos hemos pasado por eso en mayor o menor medida.

¿Quieres un consejo?. (Da igual lo que respondas, te lo voy a dar y lo sabes)

Si tan bueno es el libro, repítelo.
Si tanto efecto ha causado en tí, repítelo.
Si te ha cambiado la vida para mejor, repítelo.
Vuelve a leerlo. Una vez más, y dos, y cógelo de vez en cuando.

No puedes aprenderte el libro la primera vez, al contrario, al poco tiempo perderás mucha información y cuando quieras hablar de ese libro que te ha llevado 32 horas leértelo, sólo sabrás hablar quince minutos.

De modo que, repite esa lectura, al igual que te recomiendo repetir todo el contenido que sea de tu interés, sobre todo el relacionado por convertirnos en una especie de seres más bondadosos, más efectivos, más atrevidos, más audaces, porque de lo contrario, el troglodita que llevamos dentro, y que siempre tira de nosotros de vuelva al troglodita que somos, nos irá llevando poco a poco con el paso del tiempo al mismo lugar de donde venimos, al instinto.

Repite lo que te hace crecer.

Repítelo.

Pero no me hagas repetir más que me sigas en mi newsletter.

Deja un comentario